Tenaz y sublime, mujer de rasgos
desconocidos.
A mi presencia solo en cuadros
memorizo cada borde,
Viñeta y pincel Y en ti, más que polvo
a tu memoria
Sabrán más que pocos.
Y en sol de luna, un felino te atiende
al atardecer del valle.
Dedujiste a Cesar y Marco Antonio,
Tu despista fue la ruina del reino,
Proceso de cierre tu vientre a luz
Cesarión arrebato de muerte y engaño
Y otros que huyeron y en seno ajeno
sus días pasaron.
El amor por dos hombres envueltos por
armas,
Inspirado romance de serie entre
pasión y muerte,
Poder y avaricia.
Y su muerte ambos derribados en tus
brazos.
Y don Octavio, ruin y fugaz ser del
pecado envuelto
En el despecho de un lugar desierto
dejo caer una carcajada
Cuando yacía tu cuerpo en el cesto de
mimbre.
Sin aliento, sin respiro.
El final de la mujer de mis sueños
Aquella que en engaño lloroso
Me alejo del pecado,
Y de ensueño profundo,
Respiro robado de mi boca,
Y cada recuerdo que me trae de ti.
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