Insinuar un verbo de
admiración es predecible y común.
Idolatrar ese mismo
verbo se logra con un poco de locura.
Creer en las
palabras, amar cada sustantivo,
Entregar el alma al
adjetivo, que describe.
Es la locura, aquella
que abduce al poeta de lo terrenal,
Lo transporta al
océano de silabas
Y enamora de una
oración simple.
Conocer la locura...
Comprender lo
esencial. El alma.
La belleza absoluta.
Insinuar una metáfora
es entrar por una ventana,
Dejar la descripción
al que entiende.
Acariciar una nube
con una consonante,
Enamorar al roció de
la aurora con una vocal.
Es la locura, aquella
que abduce al poeta de lo terrenal,
Lo envuelve. Lo
enamora.
La locura eres tú,
sustantivo de mujer
Adjetivo de belleza.
Insinuar un verbo de
admiración es predecible y común.
Apasionar ese mismo verbo
se logra contigo, locura.
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